Silencio que duele.
Silencio que mata.
Silencio que hiere.
Silencio.
¿Por qué no hablas?
Silencio.
¿Por qué no contestas?
Silencio.
¿Por qué no sonríes?
No puedo.
Silencio, no habla, silencio.
¿Me ignoras?
Silencio.
Me duele.
No puedo.
¿Qué ocurre?
Un día tras otro,semana tras semana,meses, años.
Silencio.
Cuando hay dolor, hay silencio.
Dolor.
Unas lágrimas insistían en escapar,pero,con bastante esfuerzo,volvieron a su lugar.
Silencio.
Dolor.
Y lo que venga después… silencio.
Reseña de Diario de Pueches por Leandro LLull
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El empalme entre experiencia y escrituraPOR LEANDRO LLULL
Lejos está este diario de ser la contracara de un libro, fuere de la propia
autora (*Puelche...
Hace 1 día
4 pensamientos:
Entiendo eso.. perectamente....!
Silencio, duele el silencio más aún si está frente a uno los labios que podrían desvanecerlo, pero sigue silente.
Es un gusto visitar tu blog. Saludos
Juan Carlos.
yo a veces prefiero el silencio..
un saludo!
Hay momentos en que es necesario el silencio, pero en la pareja es mejor hablar.
Muy buen poema.
Alejandro.
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