Sin nombres.

-Hola. ¿Puedo pedirte un favor?
-Qué quieres, estoy ocupada hablando con mi amiga.
-Sólo una cosa, por favor.
-Vale, dime, pero..estás borracho, así que habla y vete, no me gustan los borrachos.
-¿Puedo acariciarte la mejilla un momento?
-¿Qué?
-Sólo quiero saber qué se siente al acariciar una piel como la tuya.
-¿Si te dejo hacerlo te irás?
-Si.
-Vale.

Levanta su mano, me mira a los ojos intensamente. Desliza el dorso de la misma por mi mejilla suavemente. Cuando acaba permanece mirándome un segundo y comienza a darse la vuelta, antes de que se vaya coloco mi mano sobre su brazo.

-No te vayas.
-Estoy borracho.
-Se te pasará.
-Si me quedo, será por mucho tiempo. ¿Te arriesgas?
-Espera. Bésame y te contesto.
-Tal vez no sea mi mejor beso, estoy borracho.
-Inténtalo.
-Ven.......
-No te vayas, es el mejor beso que me han dado en la vida.
-Me quedo, soy el que no dejas de buscar, te cuidaré, te comprenderé, te acompañaré. Seré tu amigo, tu hermano, tu amante. Nos admiraremos y eso hará que nos amemos más. Te diré todas las cosas bonitas que deseas escuchar cada noche.
-Qué cosas.
-Te diré que me gusta todo de ti, tu hablar, tu andar, tus movimientos felinos, tu ropa, tu pelo..Te diré que te echo de menos al minuto de separarme de ti. Te diré que me encanta cada segundo que paso contigo...
-Espera, espera. Dosifícalo, no me lo digas todo hoy.
-Está bien. Sólo una cosa más.
-Dime.
-¿Cómo te llamas?
-Eso no importa, soy la que no dejas de buscar..