llenándose de sí mismas
delicada forma la de sus ojos serenos
emergiendo
sostenidos
en la madre de todo silencio.
Dobla el verso la esquina
y se muerden en los labios
con la punta de los dedos.
Distribuye la soledad y deja
de existir. Brotan las flores.
Abandono la fórmula de la memoria
y los perfiles de las sombras
dibujados para nadie.
Me entrego a la noche
me río, me incorporo,
me rebelo
buscándote siempre.
Mónica López Bordón
*Cuadro: "El baño de Venus". Auguste Glaize
1 pensamiento:
Magnífico, Mónica.
Te felicito
Gracias
Ío
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